Una de las aplicaciones más sencillas de los conocimientos que nos brinda la numerología es el hallazgo del número de nacimiento, que influye poderosamente durante toda la vida. Se trata de una operación muy sencilla: Basta con sumar todos los números que componen la fecha del nacimiento, y sumar nuevamente el resultado, hasta lograr un solo guarismo entre el uno y el nueve.
Pongamos un ejemplo: imaginemos que deseamos hallar el número de nacimiento que corresponde a una persona nacida el 28 de octubre de 1944.
Para ello habremos de sumar los números individuales de la fecha de nacimiento (28/10/1944): 2+8+1+0+1+9+4+4 = 29. A continuación sumamos los dos números que componen esta última cifra: 2+9 =11. Ahora volvemos a sumar el resultado para lograr un solo dígito: 1+1 = 2. Este es el número de nacimiento, el 2.
No supone una explicación total de la personalidad del sujeto, tan compleja que incluso resulta contradictoria, por lo que se atribuyen otros números, como los vistos anteriormente, además del número de la fortaleza personal, entre otros.
El número uno es el símbolo de la unidad, es el punto de partida. Representa el universo, el que se autoabastece. Es la potencia, la fuerza creativa, el desarrollo, la evolución, a creación que se concreta mediante la fuerza. Éste es un individuo hiperactivo, individualista, egoísta, que no permite que se le imponga nada. Desea hacer y deshacer todo a su manera. No se encontrará en el número 1 a sujetos pacíficos, relajados, con deseos de poner en práctica las ideas de otros. Muy por el contrario, será alguien que necesitará imponer su propio estilo y dejar huellas a su paso. Aparentemente, el 1 respeta las opiniones de los demás; puede acatar órdenes de muy buen grado, pero en realidad lo que hace es no enfrentarse. Siempre buscará la forma de salirse con la suya sutilmente, reafirmando su convicción de que la mejor manera de hacer tal o cual cosa es la que él utiliza. Las opiniones de los demás sólo le sirven para mejorar las propias y alabará una opinión ajena, solamente si es coincidente con la suya. El 1 es poseedor de una mente rápida, que funciona con mucha intensidad. Los elementos de triunfo son su intuición y su sentido común. Es un individuo con gran capacidad de adaptación, arraigado sentido de la supervivencia y la competencia, además es absolutamente realista. Este tipo de personalidad le da mucha importancia al poder del dinero y valora mucho a los que son capaces de conseguirlo, así como es muy manifiesto su rechazo hacia las personas que no tienen como meta los logros materiales. Como para él lo más importante es el dinero, no puede concebir que alguien no piense lo mismo. En el hogar, se esfuerzan para ser buenos cónyuges y mejores padres, disfrutan de la vida en familia y todo lo que eso significa, reuniones con los seres más cercanos, encuentros con amigos, etc. El aspecto más destacado de la personalidad 1, es su necesidad de triunfar. Para lograr estos sueños no duda en usar a los demás en su propio beneficio. Son especulativos e individualistas. Jamás podría integrar un equipo de trabajo, o ser parte de alguna sociedad con fines compartidos. Un 1 puede ser brillante y minucioso en el área laboral, pero en la parte emocional seguramente no actuará de la misma manera. Será un tanto recatado y pudoroso en su vida sexual y afectiva, le costará mucho expresar lo que siente. Sin embargo detrás de esa aparente monotonía, suele haber una gran necesidad de un trato amable y cariñoso. En la mayoría de los casos se trata de personas sexualmente ardientes.
Lo positivo: Fuerza, empuje, ambición, empeño, enérgica actividad, inteligencia ágil, intuición, sentido común, realismo, habilidad para ganar dinero, conciencia de los límites, ingenuidad, afán de superación, amor a la familia.
Lo negativo: Egoísmo, tacañería, individualismo. Tendencia a la autodestrucción, melancolía, depresión, pavor al fracaso, testarudez, carencia de escrúpulos, pesimismo, confusión, materialismo, añoranza del pasado.
El número dos es el par, la pareja, las sociedades, lo consciente y lo inconsciente, el principio de la familia, la vida privada y la social. El individuo 2 es hospitalario, amistoso y se satisface haciendo uso de su amabilidad. Es un buen anfitrión, y como tal, ofrece todo lo que posee para halagar a los que visitan su casa, sitio donde nunca faltará un lugar para hospedar a quien llegue inesperadamente. Disfruta plenamente de la vida de hogar, de las reuniones de familia, de estar pendiente de los cumpleaños o aniversarios de sus familiares o amigos; está permanentemente atento a los demás. En muchos casos se le hallará perteneciendo a algún tipo de sociedad comunitaria o incluso haciendo incursiones en la política, a través de la cual podrá además satisfacer su necesidad de reconocimiento y compañía. No soporta la soledad. Es del tipo de persona que siempre estará rodeada de amigos, música para combatir el silencio, o un teléfono para hablar con alguien. En la personalidad 2, la vida social y familiar juega un papel absolutamente predominante. Suelen querer tener muchos hijos, o siempre están proponiendo reuniones o campeonatos de algo, simplemente para tener algún motivo para montar «cachondeo». Otra faceta de esta personalidad, es su importante timidez, en contraposición a su impecable actuación social. Frecuentemente suelen mostrarse asustadizos y hasta pueden parecer cobardes frente a la lucha cotidiana por sobrevivir. El 2 puede ser capaz de renunciar a sus pertenencias antes que enfrentarse a una situación competitiva que le atemoriza. Jamás podría rivalizar con la ambición y la fuerza de un 1, por ejemplo. Le gustaría triunfar, por supuesto, pero muy pocas veces logran sobresalir en algo realmente. Su falta de empeño unido a su pereza, no hacen más que buscar excusas para justificar esa situación. Cualquier cosa que les interese, pero tenga algún grado de dificultad, pasa a no interesarles más, de ese modo, nunca será por temor, el abandono de una batalla, por pequeña que ésta sea.
Los de personalidad 2, son aptos para los deportes y pueden destacarse en aquellos que dependan de un equipo, especialmente en los puestos defensivos; también serían buenos nadadores, aunque no tienen demasiada atracción por el agua. Por el contrario, demuestran un gran amor por la tierra, les encantan las montañas y cualquier actividad en el campo. Son muy buenos cuidando plantas de todo tipo, además tienen buena relación con los animales domésticos. Los empleos de recepción o relaciones públicas y en general todo aquel en el que deban estar en contacto con la gente, les permite canalizar perfectamente sus capacidades. En general gozan de buena salud, pero tienden a la hipocondría, o sea, una exagerada preocupación por sus malestares físicos, que por supuesto comunican a quienes estén cerca.
Lo positivo: Serenidad, sociabilidad, cordialidad, generosidad con sus seres queridos, bondad, espíritu comunitario, afectividad, fidelidad, romanticismo, entusiasmo.
Lo negativo: Envidia, falta de iniciativa personal, cobardía, celos, conformismo, hipocondría, monotonía, terror a la soledad, debilidad de carácter, timidez, paranoia.
El número tres simboliza la expansión. Cuenta con una gran sagacidad para lograr sus objetivos. Son personalidades básicamente utilitarias, analizan y estudian minuciosamente toda información que llega a sus manos, para ver de qué manera se le puede sacar mejor provecho. Son absolutamente obcecados en sus intenciones, hasta el punto de hacer cualquier cosa por lograr sus propósitos. Pero al igual que son algo cabezotas, son inconstantes y pueden abandonar el proyecto que más les apasione, por no perseverar en su definición. No sólo son variables en la realización de sus proyectos, sino también con sus sentimientos. Los 3 aman todo lo que les llegue a las manos, lo desconocido, lo excitante, les fascina empezar siempre de nuevo. Ponen en el proyecto toda su habilidad y su capacidad mental, que suele ser ágil y rápida – claro que por poco tiempo. La rutina de la tarea emprendida no tarda demasiado en cansarle, por lo cual inmediatamente se pone en marcha en busca de un nuevo estímulo. Exactamente igual le sucede con las personas y en su vida sentimental, es prácticamente imposible que sea fiel a una pareja.
La personalidad 3 es muy narcisista. Tiene verdadera devoción por su imagen, que no descuidará bajo ninguna circunstancia. En general, será un ser muy comprensivo frente a situaciones complicadas de quienes le rodean, pero nunca tanto como lo es consigo mismo. Este ser encantador y espontáneo, actúa siempre guiado por su intuición y especialmente por sus creencias. Si causa algún daño a alguien, pedirá sinceras disculpas, pero si el reproche continúa inmediatamente considerará que no merece ese mal trato porque él lo hizo sin querer. Este comportamiento en otro tipo de personalidad, podría ocasionar muchas fricciones, pero no en un 3, porque generalmente posee una gran capacidad de seducción, que neutraliza cualquier situación adversa. Realmente es casi imposible encontrar una personalidad 3 que sea antipática, más bien se trata de sujetos cordiales, amistosos, de conversación muy agradable.
Son sujetos muy ansiosos, angustiados, siempre con varias cosas por hacer, es muy difícil encontrar un 3 que sea sereno y reflexivo. Poseen un gran dinamismo y energía, les encanta comenzar el día muy temprano y tener varios proyectos a la vez, cosa que no siempre tiene su recompensa, porque la inconstancia hace que malgaste mucha energía. Hay que reconocer que con mucha frecuencia logran triunfar en alguno de los tantos proyectos que intentan. En general este tipo de personalidad carece de prejuicios, por eso son personas muy tratables, amables y progresistas. Consideran lógica la igualdad femenina, por lo cual son muy respetuosos hacia la mujer, en una relación nunca asumirían una postura machista.
La personalidad 3 se comporta en todo momento como si su único objetivo fuera destacar, el conformismo, la rutina y la monotonía son sus peores enemigos.
Lo positivo: Sagacidad, ansias de superación, magnanimidad, dinamismo, seducción, cordialidad, simpatía, brillo social, creatividad, talento, buen gusto, sentido del humor.
Lo negativo: Inconstancia, hedonismo, interés, materialismo, exhibicionismo, narcisismo, hipocresía, fanfarronería, sobre valoración, irresponsabilidad, frivolidad, insensibilidad, vanidad, deslealtad.
El mundo del número cuatro es el imperio de la voluntad. Pocas personalidades tienen una tenacidad tan admirable, aunque lamentablemente para ellos, también son dueños de una gran obstinación. Esto sucede porque confunden su sensatez y tenacidad, con la necesidad de defender una postura frente a los demás, con lo que logran únicamente que los demás les pongan el mote de «necio». Ni las pruebas más fehacientes lograrán que se dé cuenta de su equivocación, salvo que luego a solas, vuelva a analizar el tema y logre comprenderlo por sí mismo. El 4 es un individuo extremadamente responsable, tanto que para él será la misma ofensa no acudir a una cita para tomar un café, como para cerrar un negocio multimillonario. Él jamás faltaría aunque tuviera que pasar por miles de dificultades para lograrlo, sea cual fuere el motivo de dicha cita. Esta actitud, de darle tanta importancia a todo, hace que en la convivencia se vuelvan un poco pesados no es fácil soportar la misma exagerada reacción si se rompe una tacita de café de uso diario, como si se rompe el frigorífico. Suelen ser propensos a grandes escenas y terribles discusiones, sin ningún tipo de mesura. Pero si tienen ocasión de descargar su ira en poco tiempo se les pasa, olvidan el incidente y recuperan su temperamento optimista e irónico que les caracteriza.
La ironía suele ser uno de los aspectos más positivos de su personalidad, su rapidez mental les predispone a respuestas brillantes y bromas sarcásticas que arrancan las carcajadas de los demás. Suelen ser muy comunicativos y tienen una particular capacidad para percibir el temperamento ajeno, encontrar el punto débil y destacar aquello que justamente debería ocultarse.
Su carácter optimista, su agudo sentido del humor y su sólida personalidad, no tardan en llamar la atención. No es común que un 4 concurra a una fiesta y pase desapercibido, el atractivo de su personalidad casi siempre les ubica en un lugar especial en el círculo social que frecuentan. Este modo de destacar es un mérito que se le debe reconocer porque casi siempre la personalidad 4 es mucho menos segura de sí misma de lo que aparenta.
La personalidad 4 saborea frecuentemente la amargura de la desdicha y el arrepentimiento. Su responsabilidad le impide auto-engañarse y paga un precio muy alto por esta honestidad moral.
El 4, que es un triunfador y se destaca frecuentemente en lo que se propone, suele empañar su victoria con un gran caudal de incertidumbres que anidan en el fondo de sí mismo.
Este tipo de personalidad alberga sentimientos e ideales muy profundos y cuando se dedica a un proyecto pone en funcionamiento toda su capacidad de trabajo y su gran perseverancia para lograr su objetivo. Visto desde fuera, esta personalidad parece que tuviera mayor facilidad que otras para lograr sus metas, pero en realidad lo que es mayor que en los otros es el esfuerzo que lleva a cabo para conseguirlas.
Lo positivo: Lealtad, honestidad, responsabilidad, tenacidad, orgullo, sinceridad, optimismo, sentido del humor, inteligencia, fuerza interior, idealismo y valentía.
Lo negativo : Susceptibilidad extrema, arrogancia, torpeza, especulación, perpetua insatisfacción, terquedad, inestabilidad emocional, resentimiento, culpa, remordimiento, tendencia al melodrama. Es curioso, egoísta y de espíritu inquieto.
Para el número cinco vivir es una aventura apasionante; todo lo que le rodea es digno de ser analizado y observado para sacar conclusiones que podrían llegar a aportar datos aún no conocidos. Esta tendencia obedece a que, en el fondo, al 5 no le bastan las explicaciones superficiales; lo más terrible que puede ocurrirle en la vida es no comprender algo que esté sucediendo alrededor suyo, por eso averigua, inquiere e investiga hasta el cansancio. Necesita acumular la mayor cantidad de información posible para saber qué es lo que está sucediendo en profundidad. Son personas que suelen ser arrogantes, debido a que realmente sienten una alta estima por ellos mismos, consideran que no hay nada más aberrante que no usar toda la capacidad intelectual que uno posee. La inteligencia es uno de los valores que más respeta. En general no son nada divertidos y mucho menos cordiales, aunque les encanta tener quien les escuche, pero por la sencilla razón de que piensan que su punto de vista tiene una importancia superlativa y nadie debería perdérselo. Ahora bien, si para lograr esa audiencia tiene que someterse a escuchar conversaciones sin contenido o participar en debates bajo su criterio intranscendentes, prefieren renunciar de antemano.
Para una personalidad 5, nunca será prioritario hacer mucho dinero, consideran la importancia de éste en tanto y en cuanto pueden lograr a través de tenerlo cosas tan importantes como la libertad, la posibilidad de viajar, o el manejar su propio tiempo sin tener que estar con un horario estricto de trabajo. Sin embargo, no todos los que pertenecen a este número son buenos administradores. Hay quien malgasta el dinero como si no fuera propio, y otros llegan a límites irracionales de avaricia. No encontrará en ellos a su «amigo del alma», y tampoco son fieles ni leales. Más vale no esperar de ellos esa ayuda de último momento para superar una mala época ya que no se distinguen por ser solidarios, puesto que para ellos cada uno debe hacerse responsable de sus propios conflictos, así es que cuando tienen un problema jamás se les ocurriría pensar en recibir ayuda de sus seres queridos. Otro aspecto que les caracteriza es su capacidad de cambio, a pesar de estar involucrados en profundizar y comprometerse plenamente con lo que les interesa.
Podría decirse que nunca echan raíces, están siempre dispuestos al cambio y no sienten temor ni nostalgia en cambiar de lugar, de amigos, de pareja, incluso de país, buscando siempre nuevos horizontes. La afectividad del 5 es bastante superficial, puede creer que ama profundamente, pero en realidad nunca se entregará íntegramente; incluso creyendo que está muy enamorado, no tendrá ningún reparo en abandonar a quien ama por cualquier circunstancia que le haya motivado. Infieles, fríos y mentirosos, nunca llegan a perder la cabeza por nada ni nadie.
Lo positivo: Curiosidad, inteligencia, sensibilidad artística, imaginación, capacidad analítica, habilidad manual, paciencia, independencia, pulcritud, intensidad, responsabilidad.
Lo negativo: Falta de escrúpulos, infidelidad, exceso de valoración, arrogancia, egoísmo, espíritu vengativo, rencor, intolerancia, frialdad afectiva, cólera, aburrimiento. En general estas personalidades se muestran como seres tranquilos y serenos. Proyectan mucha energía en el trabajo. En el área social se muestran como buenos comunicadores y en el hogar como seres burgueses con anhelos de mayor confort. Sin embargo, detrás de esa aparente tranquilidad, al poco tiempo de compartir cosas con esta persona puede detectarse que su interior poco tiene que ver con lo que muestra en su forma exterior. No obstante, no es una postura consciente, sino que son rasgos de su personalidad dual que ni ellos mismos reconocen tener y creen que se están mostrando tal cual son.
Los número seis, muy rara vez se conocen a sí mismos, irán de un extremo al otro, entre el idealismo y el pesimismo y no podrán establecer nunca una valoración exacta de su forma de comportarse. Así también lo hacen con las personas con quienes se relacionan y cuando escogen un amigo, se confían a él totalmente, aunque si por alguna causa se sienten defraudados, sufren terriblemente al descubrir una verdad que nunca dejó de estar. La personalidad 6, interiormente está siempre en busca de sitios seguros donde descansar su ingenua y confiada esencia. Posiblemente frente a la sociedad se comporte con el escepticismo que le impone el medio en el que vive, pero su necesidad profunda es otra, puesto que él ya vive internamente un estado continúo de contradicción y desconcierto. Aunque los poseedores de este número se muestran de muy diferentes maneras los unos de los otros, tienen en común el ser puntillosos y ordenados y se puede tener absoluta seguridad que en lo que esté a cargo de ellos no quedará nada fuera de lugar, incluso en el trabajo, donde suelen ser bastante descuidados. En los momentos de dedicación saben concentrarse y realizar su labor muy bien. Suelen llegar a lugares prestigiosos por la perseverancia y meticulosidad con que desarrollan sus actividades. En el hogar son seres comprensivos con su familia, se rodean de un halo de cordialidad y son amantes de la buena vida. Les encanta poseer un buen sillón sólo para ellos y disfrutar de ropa cómoda y un buen libro. Les gusta la televisión, el cine, el teatro y toda manifestación artística que represente la vida real. Como en general tienen habilidad para ganar dinero, no se les hace difícil conseguir esos pequeños placeres.
En el aspecto social, pueden ser agradables y divertidos, pero a pesar de ser buenos conversadores, su marcada timidez les impide destacarse en las reuniones, no obstante ponen entusiasmo en la relación con los demás. Sin embargo, llega un momento en que su participación se altera inevitablemente, porque en el momento de tomar decisiones resultará poco menos que imposible sacarle a un 6 una opinión que refleje lo que verdaderamente piensa frente a personas que no sean de su absoluta confianza.
Lo positivo : Corrección, confianza, ingenuidad, lealtad, solidaridad, meticulosidad, higiene, sagacidad, habilidad para ganar dinero, ternura, comprensión, fidelidad, consideración hacia los demás.
Lo negativo: Capacidad de manipulación, inestabilidad, desconcierto, confusión, falta de escrúpulos, extremismo, indolencia, fatalismo, debilidad, distracción, imprecisión.
El número siete es el que todo lo comprende y todo lo contiene. Es la figura protectora, el que lleva en sí mismo fuerzas diferentes que nunca llegarán a enfrentarse, para proporcionar protección y seguridad. Jamás, en ninguna circunstancia será posible encontrar el punto débil de este tipo de personalidad. Los 7 no soportan a los débiles, temerosos de enfrentarse a las luchas, valoran mucho la valentía. Podrán ofrecer ayuda a quien lucha y es vencido, pero nunca harán lo mismo con aquel que se entrega sin luchar.
La personalidad 7 es en general bondadosa, llena de nobles sentimientos. Son dueños de una gran capacidad de reflexión, posesión que les permite actuar generalmente con sensatez y sentido común. Posee además un excelente sentido de adaptación, de manera que no es para él muy difícil adaptarse a los imprevistos y nuevas situaciones que se le presenten.
Suele decirse que los 7 son necios; son personas inteligentes, pero muy poco flexibles, ellos suponen que cambiar los propios puntos de vista denota falta de personalidad. Lo terrible es que consideran que ser terco es distintivo de una personalidad fuerte. No importa el grado de cultura que el individuo posea, él siempre creerá que defender un punto de vista a cualquier precio es ser coherente consigo mismo.
Los 7 no son indolentes de ningún modo, pero son perezosos. Posiblemente en el momento de trabajar no ponga creatividad, pero se dedicará plenamente a su tarea y la hará con una resistencia difícil de superar, ya que su capacidad de trabajo es muy grande y suele utilizarla generosamente. Pero después del trabajo, su necesidad de recuperación no aceptará ningún tipo de ofrecimiento que no sea quedarse en casa y descansar. Las aparentes indecisiones no son más que pereza. Cuando tienen una obligación dan miles de vueltas antes de enfrentarse a ella y no es que no sepan qué hacer, simplemente están tratando de disfrutar un poco más del «dolce fare niente», que constituye una parte importante de su vida. Como norma general, son personas bondadosas y protectoras, poseen mucha seguridad en sí mismos y un gran espíritu samaritano. Suelen ser magnánimos y generosos. A pesar de la imagen de fortaleza y seguridad, es posible que su salud tenga visos de precariedad, el corazón y el aparato digestivo son áreas donde puedan localizarse problemas. Es común que tengan digestiones lentas y frecuentes dolores de cabeza. Son seres carentes de iniciativa, frecuentemente dan la imagen de personas indiferentes. Esto es absolutamente erróneo, sí que es cierto que no se apasionan fácilmente con nada, cuando lo hacen ponen un empeño y una perseverancia que no muchas personalidades son capaces de tener.
Lo positivo: Nobleza, dignidad, altruismo, idealismo, pudor, discreción, fortaleza, valentía, bondad, generosidad, protección a los débiles, sabiduría, ecuanimidad, sinceridad, capacidad de adaptación, afectividad, humildad, imaginación, sensatez.
Lo negativo: Gusto por la rutina, monotonía, pereza, falta de iniciativa, terquedad, escaso sentido del humor, conformismo, previsibilidad, escasa ambición, mezquindad, aburrimiento.
La personalidad número ocho, aporta al individuo un importante grado de sensibilidad. Son muy impresionables, se
asustan frente a la posibilidad de una operación o al recibir alguna herida y la sangre les espanta hasta el desmayo.
Se relacionan muy bien en sociedad y en el trato con la gente suelen ser muy cuidadosos, cordiales y simpáticos. También son susceptibles al modo en que se les trata porque una palabra que no les gustó o un tono inadecuado son suficientes para hacerles daño.
Un 8 no se destaca por su imparcialidad, nunca mide con la misma vara su conducta y la de los otros. En general no soporta que le indiquen sus errores, pero él no deja pasar uno de los demás. Esto demuestra el nivel de indulgencia que poseen consigo mismos. El 8 es muy propenso a lamentarse dé su suerte y siente que es el único y más sufrido de los seres de la tierra. Ésta puede ser la causa por la que es incapaz de ponerse límites y se permite prácticamente todo. Claro que no será fácil conocerles muy profundamente, porque son muy cambiantes además de arbitrarios y caprichosos, lo que ayer era la luz de sus ojos, hoy ha dejado de interesarles. Tan pronto son buenos como malos, cariñosos como indiferentes, magnánimos como egoístas. Todos estos cambios hacen pensar en los 8 como personas hipócritas y lleva buena parte de razón quien así lo crea.
El 8 es muy buen orador, se escuda en las palabras, que suele manejar muy bien. Todo lo que se trasmite hablando le fascina. Es el número que siente más atracción por los secretos. Su nivel de ambición, les convierte en descarados y pueden comportarse como si les conviene, o mostrarse sumisos y manejables si eso les ayudara a conseguir sus propósitos. No suelen fijarse metas, pero cuando lo hacen son capaces de apelar a cualquier artilugio con tal de lograr lo que se han propuesto. Si hieren su vanidad pueden ser injustos y arrogantes, pero si eso no sucede suelen hacer gala de un interesante sentido del humor, se muestran sensibles y con buena disposición en participar o realizar planes en grupo. En general no suelen tener prejuicios. Saben comportarse y sus gustos son refinados, por eso detestan a la gente torpe, burda y su bien manejada ironía les es suficiente para ponerles en su lugar. Saben divertirse y entretener a los amigos, aún a costa de terceros. Habitualmente son de carácter alegre, esto sumado a su atractivo social y su elocuencia hace que frecuentemente haya personas enamoradas de ellos.
Lo positivo: Sensibilidad, emotividad, simpatía, cordialidad, sentido del humor, ironía, brillo social, espontaneidad, capacidad de adaptación, agilidad mental, inteligencia, elocuencia, convicción, ambición, buena disposición, refinamiento.
Lo negativo: Dualidad, hipocresía, tendencia a la mentira, autocompasión, hipocondría, falta de iniciativa, indecisión, poca escrupulosidad, indiscreción, dispersión, infidelidad, celos, desorden.
El número nueve habla de independencia de criterios. Los individuos que pertenecen a este número son mentalmente independientes y sufren cuando se ejerce presión sobre ellos o se les intenta coaccionar.
Hay dos personalidades de este tipo: unos que son pesimistas y tienden a ver de un modo depresivo sus oportunidades, dejándolas escapar. Otros, los que son eternos optimistas a los que ninguna contrariedad puede detener. Los unos y los otros tienen en común ser absolutamente honrados y justos en las decisiones. Los 9 pueden llegar a tener fama de falsos, pero eso no es así. El tema es que cambian la realidad y pueden actuar de una manera diferente a la que piensan, pero también es verdad que son muy honrados y no podrían con la culpa si hicieran algo desleal. No es difícil hallar un 9 mentiroso, pero es prácticamente imposible hallar a un traidor. Él siempre sabe donde detener sus mentiras para no causar daños graves.
La personalidad 9 se distingue por su interesante capacidad para dar respuestas rápidas y brillantes, aún en los individuos más depresivos y llenos de indecisiones. Es muy difícil sobrepasar a un 9 en el diálogo, en el juego verbal, su inteligencia posee una gran capacidad de observación y coge al vuelo todo lo que sucede a su alrededor. Esto le permite elaborar respuestas rápidas y brillantes, por lo que nunca queda en mal lugar. El 9 suele ser grandilocuente, apasionado, muchas veces exagerado y en la mayoría de los casos, torpe. No es sensible al mal humor ajeno, y salvo raras excepciones no guarda rencor. No es un analista del comportamiento humano, simplemente olvida con rapidez y empieza una nueva etapa como si nada hubiera pasado. Generalmente son seres generosos en todas las áreas, así que no será contradictorio que también lo sean con los defectos de los demás. Para lo bueno y lo malo son exagerados, buscan siempre perdonarse sus propios defectos con rapidez y encuentran la cara más divertida y brillante de la vida. Suelen usar mucho tiempo y energía en ambiciosos proyectos en los que no es común que el sentido de la realidad esté presente. Pero como son básicamente optimistas natos, que un proyecto se derrumbe difícilmente les deprimirá porque seguramente ya estarán embarcados en la nueva aventura. Son arrogantes e impulsivos, carecen de paciencia, todo lo que desean lo quieren ya, y en lo posible sin ningún esfuerzo. Los 9 a pesar de su inseguridad y de su tendencia al desconcierto, suelen destacar socialmente porque se comportan como personas seguras de sí mismas con un gran autodominio y una especial seducción para caerle bien a los demás.
Lo positivo: Optimismo, buen humor, inteligencia rápida, intuición, independencia, imparcialidad, honradez, sinceridad, espíritu aventurero, sociabilidad, magnetismo, pasión afectiva, generosidad, competitividad, alegría de vivir.
Lo negativo: Cobardía, irascibilidad, inseguridad, escaso sentido de la realidad, tendencia a la exageración, necesidad de mentir, superficialidad, desconcierto, torpeza, arrogancia.