Carl Jung tiene el gran mérito, desde mi punto de vista, de no desmerecer ninguna fuente, cultural, científica y folklórica a la hora de abordar el análisis de sus demonios que tienen mucho en común con los de todos.
Sus vivencias, traumáticas, dieron vida a este texto que no se publicó hasta 2009, nacido de su ruptura con Freud debido a sus discrepancias metodológicas generando una separación intelectual en 1913. De esa situación, llamada de diferentes formas (enfermedad creativa, un ataque de locura, una auto-deificación narcisista, una perturbación mental con episodios psicóticos, un proceso de reencuentro con el alma), surge este texto clave para entender la obra y el pensamiento de Carl Gustav Jung, permaneció custodiado en la caja de seguridad de un banco suizo durante años. Los herederos del psiquiatra se negaron a que fuera expuesto al público, editado o incluso consultado por los expertos en la obra del suizo. Quizás lo vieran, a él y sus demonios, demasiado expuesto.
Desde el punto de vista narrativo, el Libro rojo es una especie de epopeya en la que un hombre que ha perdido su alma, el propio Jung, sale en su búsqueda y acaba recuperándola después de vivir mil y una aventuras y superar diferentes peligros. La búsqueda de la luz, peregrinaje de un hombre en el descubrimiento hacia Dios, con la ayuda de la razón (Virgilio) y de la fe (Beatriz) en la Divina comedia. No sólo reflexiona, también ilustra el texto.
Pone fin a sus reflexiones cuando en 1928 Richard Wilhelm le envía un ejemplar recién traducido al alemán de Flor de oro, tratado taoísta y alquímico. Jung entiende que debido a esta publicación, su “Libro rojo” había encontrado su lugar en la realidad, a pesar de incorporar numerosos elementos procedentes de muchas disciplinas, incluida la Alquimia.
Aunque en 1959 intentó retomar la obra para incorporar un último fragmento dedicado a la muerte, finalmente no fue capaz y decidió escribir un último diálogo entre los personajes principales de la mujer, el viejo y la serpiente, (ejes de su teoría) que aunque era una forma abrupta y no demasiado convincente de acabar la narración, al fin y al cabo era un final.
Entre mis rutinas diarias, tengo la «obligación» de pensar críticamente sobre mí en el momento presente y mi yo a lo largo de mi vida biológica. La madurez y la inteligencia emocionales ayudan a que puedas interpretar adecuadamente y con perspectiva tus decisiones, tus anhelos y tus errores, pero un extra nunca viene mal. Para ayudarte en momentos en que ni siquiera el discurso racional sirve -o tu parte amiga está medio dormida- la lectura de ciertos conceptos y herramientas psicológicas resulta tremendamente útil.
KIGAI: una razón para vivir. Tu propósito. La búsqueda del «Loco»
El Ikigai es el centro donde confluyen pasión, misión, profesión y vocación es el Ikigai de cada persona para los japoneses. Y no es fácil, ¿verdad? Especialmente lograr recibir un salario por algo que haces bien y que, además, te gusta.
Encontrar el Ikigai supone encontrar lo que haces bien y, además, te apasiona, por lo que te permitirá tener muchos momentos de felicidad en tu día a día.
A veces no comprendemos que no tenemos o hemos perdido el propósito de nuestra vida. El Loco, en una de sus acepciones, te invita a preguntarte qué te gustaba hacer en tu infancia, cuando tu espíritu era puro y libre. Las convicciones e imposiciones de una sociedad que cada vez se mueve más rápido te hacen creer que tu razón de vivir se identifica plenamente con el éxito social coyuntural. Puede que sea así y puede que no.
ICHIGO ICHIE: un momento, una oportunidad. El Enamorado que alcanza La Templanza.
Esta palabra surge de la ceremonia del té en Japón, una ceremonia a la que se le da una especial importancia y donde se cultivan los cinco sentidos: el sabor del té, su aroma, la belleza de los utensilios que se utilizan en la ceremonia, el gusto a través del sorbo y aprender a escuchar todo lo que rodea a la ceremonia. Enfocarse en todo ello aporta paz, serenidad y equilibrio interior.
En mi vida, este concepto lo hago mío pensando en que cada momento puede ser el mejor del día. Creo que lo que se hace, si se hace de forma consciente y lo más armónica posible, merece la pena. Desde asearte reconociendo tu cuerpo hasta utilizar una vajilla o servicio para la comida que te guste. Podría ser la unión del Enamorado con la concreción de su ángel en La Templanza. La felicidad supone la suma de micromomentos, de destellos de luz.
KAIZEN: pequeños pasos, grandes resultados. Sigue a la Fuerza.
Se trata de la unión de dos palabras japonesas ‘kai’ y ‘zen’, cuyo significado conjunto es la acción del cambio y la mejora continua, gradual y ordenada.
Adoptar el Kaizen es asumir una mejora continua evitando los desgastes en cuestiones que no aportan nada. Para practicar el Kaizen se debe comenzar por tomar una decisión y se debe comenzar a trabajar de una manera progresiva en el tiempo. Identificar un objetivo. Si este es grande, divídelo en pequeños tramos que te conducirán a ese gran final (Mundo).
La habilidad para desarrollar el Kaizen es la perseverancia, el esfuerzo continuado para conseguir pequeños hitos que, sumados, te conducirán a un gran resultado.
El Kaizen se puede utilizar perfectamente para conseguir la actitud Ichigo Ichie y, también, para encontrar tu Ikigai.
La Fuerza puede representar esa perseverancia, esa lucha desde el corazón llegando al equilibrio con la razón, ese domar tu instinto al mismo tiempo que lo escuchas.
El 2024 será el año del Dragón para el horóscopo chino, que empezará el 10 de febrero de 2024 y acabará el 28 de enero de 2025. En esta cultura, se tiene en cuenta, además del animal, el elemento que le corresponde, que puede ser Metal, Agua, Madera, Fuego y Tierra. El 2024 es el año del Dragón con el elemento madera
El horóscopo chino se corresponde con el calendario chino, que es un calendario lunar basado en los ciclos de sus fases. Los calendarios lunares se basan en los 12 ciclos completos de la Luna y son de 354 días. Por ello, el año nuevo chino es distinto al que celebramos en occidente.
¿Qué animal soy en el horóscopo chino?
Saber tu signo del horóscopo chino es muy fácil. Solo necesitas un dato: tu año de nacimiento. Cada signo del zodiaco chino tiene asignados unos años de nacimiento. Busca en esta lista tu año de nacimiento y sabrás cuál es tu signo.
Rata: Son los nacidos en los años 1924, 1936, 1948, 1960, 1972, 1984, 1996, 2008, 2020.
Buey: Son los nacidos en los años 1925, 1937, 1949, 1961, 1973, 1985, 1997, 2009, 2021.
Tigre: Son los nacidos en los años 1926, 1938, 1950, 1962, 1974, 1986, 1998, 2010, 2022.
Conejo: Son los nacidos en los años 1927, 1939, 1951, 1963, 1975, 1987, 1999, 2011, 2023.
Dragón: Son los nacidos en los años 1928, 1940, 1952, 1964, 1976, 1988, 2000, 2012, 2024.
Serpiente: Son los nacidos en los años 1929, 1941, 1953, 1965, 1977, 1989, 2001, 2013, 2025.
Caballo: Son los nacidos en los años 1930, 1942, 1954, 1966, 1978, 1990, 2002, 2014, 2026.
Cabra: Son los nacidos en los años 1931, 1943, 1955, 1967, 1979, 1991, 2003, 2015, 2027.
Mono: Son los nacidos en los años 1932, 1944, 1956, 1968, 1980, 1992, 2004, 2016, 2028.
Gallo: Son los nacidos en los años 1933, 1945, 1957, 1969, 1981, 1993, 2005, 2017, 2029.
Perro: Son los nacidos en los años 1934, 1946, 1958, 1970, 1982, 1994, 2006, 2018, 2030.
Cerdo: Son los nacidos en los años 1935, 1947, 1959, 1971, 1983, 1995, 2007, 2019, 2031.
Una vez sepas cuál es tu signo del horóscopo chino, necesitas saber también tu elemento. Hay 5 elementos y aquí te detallamos cómo saber el tuyo:
Metal: tu año de nacimiento termina en 0 o 1.
Agua: tu año de nacimiento termina en 2 o 3.
Madera: tu año de nacimiento acaba en 4 o 5.
Fuego: tu año de nacimiento termina en 6 o 7.
Tierra: tu año de nacimiento acaba en 8 0 9.
Si quieres leer alguna de las predicciones para este año, te dejo un enlace:
Ayer tuvimos la oportunidad de ver la primera luna de 2024, la luna llena del Lobo. Si te gusta admirarla y pedirle «favores», sabrás que cada luna llena tiene su nombre propio y, seguramente, también conocerás la razón de los distintos nombres. La publicación estadounidense Farmer’s Almanac desde hace tiempo se ha dedicado a popularizar los términos usados por los pueblos nativos americanos. La Luna nos ha cautivado siempre y las distintas culturas le atribuyeron poderes místicos y significados religiosos asociados a sus propias creencias y prácticas, pero también se le daban usos prácticos como medir el tiempo.
Este es el caso de algunas de las tribus y naciones nativas de América del Norte, quienes asignando un nombre a cada plenilunio podían hacer un seguimiento del paso del tiempo y las estaciones.
Te dejo todos los nombres de la luna. Por cierto: no todos los años hay 12 prenilunios como sucederá en 2024. En 2023 hubo 13. Esto sucede debido a que los meses lunares duran unos 29 días.
1 – LUNA DEL LOBO, también llamada Luna Vieja o Luna de después de Yule o de Navidad, es la Luna llena de enero en el hemisferio norte (o julioen el hemisferio sur) en que el frío intenso invita al recogimiento y las manadas de lobos aúllan en el silencio de la noche.
2 – LUNA DE NIEVE, a veces denominada Luna de Hambre, es la que se da en febrero (o agosto, según el hemisferio) y su nombre se debe a las nevadas que suelen caer durante el mes, así como a la falta de alimento para las tribus cazadoras-recolectoras, en el mundo agrícola y para los animales.
3 – LUNA DEL GUSANO, también Luna de Cuervo o de Corteza, es la Luna llena de marzo (o septiembre) en que la primavera empieza a despertar. Hay más luz y calor, y la energía regeneradora deshiela la tierra, por lo que podemos ver los agujeros de los gusanos que atraen a los pájaros, escuchamos el graznido de los cuervos y desaparece la capa de hielo de la corteza de los árboles.
4 – LUNA ROSADA, Luna de Huevo o Luna de Brotes es la que se da en abril (u octubre) y es el color de las flores lo que le da su nombre. Es el mes en que los peces nadan a contracorriente para desovar, y cuando las plantas y árboles brotan. También es el tiempo de sembrar las semillas del futuro y dejar atrás lo innecesario.
5 – LUNA DE LAS FLORES o Luna de Leche es la Luna llena de mayo (o noviembre), momento en que los bosques y llanos explotan en flor y las crías maman. Es la Luna de la celebración y de la abundancia.
6 – LUNA DE FRESA, Luna del Sol Fuerte o Luna de Miel es la Luna llena de junio (o diciembre), mes en que se realizaba la cosecha de las fresas. Los días son largos y luminosos; es el tiempo de salir al exterior.
7 – LUNA DEL VENADO, también Luna de los Truenos o Luna del Heno, es la que se da en julio (o enero), momento en que suelen darse tormentas eléctricas, aunque las noches son tranquilas y cálidas. También en este periodo a los ciervos les nace la nueva cornamenta.
8 – LUNA ROJA, Luna del Grano o Luna del Esturión es la Luna llena de agosto (o febrero) que, cuando se alza por el horizonte, se ve con tonos rojos debido a las neblinas típicas de este mes. Es también el mes de la pesca del esturión y en que los campos se vuelven dorados, pues se recoge el maíz y la cebada. Durante la última Luna llena del verano es momento de agradecer.
9 – LUNA DE LA COSECHA es la que se da en septiembre (o marzo), cercana al equinoccio de otoño. Esta es una de las Lunas que dicen “corre”, pues algunas veces se da en septiembre y otras en octubre. Es el momento en que se pueden cosechar el maíz, el arroz o la calabaza, y la Luna se ve más grande y dorada en el firmamento a causa del ángulo de la elíptica respecto al horizonte.
10 – LUNA DEL CAZADOR o Luna del Duelo es la Luna llena de octubre (o abril), momento en que caen las hojas, los campos ya se han cosechado y llega la hora de cazar el ciervo que ha engordado durante los meses de verano para tener carne durante el invierno. En esta época la Luna también se ve grande y dorada.
11 – LUNA DE LA LECHUZA, Luna de la Escarcha o Luna del Castor es la que se da en noviembre (o mayo) y es la Luna que llama a la oscuridad y a explorar el subconsciente, pues nos hemos de preparar para el invierno. También era la época en que se ponían trampas para los castores y así preparar las pieles para pasar los meses fríos.
12 – LUNA FRÍA, Luna de las Largas Noches o Luna del Roble es la Luna llena de diciembre (o junio), en que el frío es mucho más intenso y las noches son largas y oscuras. La Luna está por encima de la línea del horizonte durante más tiempo y su trayectoria es más alta, mientras que el Sol va muy bajo en el horizonte. Si es antes del solsticio de invierno se la conoce como la Luna de las Noches Largas, pero, si es después de este, se la denomina Luna del Roble.
Y sí, soy de esas lunáticas que le hablo a la Luna.
Leer el Tarot a uno mismo es posible e incluso recomendable. Lo suelo hacer, incluso a diario, dependiendo del momento vital que esté pasando. No es fácil, porque en su sabiduría el Tarot nos muestra aspectos de nosotros que no conocemos y puede ayudarnos a transitar por caminos muy oscuros para lograr una mayor luz. Sabéis que mi lucha con el Diablo se ha desenvuelto durante mucho tiempo, cuánta razón tenían. En los casos en que nos cuesta mucho dilucidar la evolución de un asunto, propio o ajeno, puede serviros seguir el momento de los Arcanos.
El movimiento no siempre se demuestra andando. Debemos tener en cuenta algunos factores:
-Los grados de la experiencia, ya que el Tarot es progresivo y evolutivo.
Una secuencia clásica que os he explicado varias veces es la de ENAMORADO/COLOGADO/JUICIO. Es una secuencia clásica que recorre los tres grados.
El Enamorado, en el inicio de su gran Viaje, cuando quiere ganar independencia, tras sus primeras experiencias debe parar. Llega el Colgado, y el Enamorado deja de imitar, debe averiguar el por qué, las causas.
Es un movimiento inapreciable porque se realiza en el interior. Si ese movimiento es natural, si se ahonda y se evoluciona, llegará el formidable Juicio, liberador, llegará la hora de la verdad y los dioses nos hablarán.
Sin embargo, es frecuente ver la secuencia alterada: COLGADO/ENAMORADO/JUICIO. Extraemos algún consejo: no queremos ahondar en alguna cuestión en la que preferimos jugar (seguir pensando que el mundo se desenvuelve como yo creo, como si fuera un niño o no entender por qué las cosas no son como yo creo) o nos gusta pensar que somos víctimas de circunstancias externas. No, la respuesta está dentro, no fuera.
A veces el Juicio no llega, a veces no nos liberamos de nosotros mismos. A veces no queremos, simplemente, madurar.
-La naturaleza de los Arcanos: pasivos, activos o neutros.
Las respuestas pueden ser incomprensibles, especialmente cuando la cuestión que se quiere dirimir tiene importancia en nuestra vida. La diferencia entre cartas activas (que definen una actitud emisora que nos lleva a un despertar) y pasivas (actitud receptora que también llevan a un despertar) parece, en principio fácil de conocer. Los sucesos activos “suceden”, los pasivos nos arrastran y los neutros no suponen cambios. Cartas activas son el Mago, la Emperatriz, el Emperador, el Carro, el Diablo, la Torre y el Loco. Pasivas: el Papa, el Enamorado, Ermitaño, la Fuerza, la Rueda, Colgado, Muerte, la Templanza, la Luna y el Loco. Neutras: Papisa, Justicia, Luna, Estrella, Sol, Juicio y el… Loco. Sí, se repiten en algunos casos. Entonces, ¿cómo sabemos cuál es la naturaleza concreta del Arcano? Depende de los demás que acompañen y de las demás reglas.
-Su base numérica. Números activos o pasivos. 1, 3, 6, 7, 9, 10, 11, 13, 15, 16, 19. Su actividad numérica no se relaciona en ocasiones con su significado en una lectura. Por ejemplo: el 8, 4+4, es pasivo. Sin embargo, muestra la perfección, es el número del equilibrio. Si aparece la Justicia, que tiene en su último sentido la justicia de los hombres, no tiene un sentido pasivo, sino que se dicta o sucede algo que, dependiendo de las demás cartas, puede favorecernos o no.
-La evolución de los objetos.
Más allá de la base numérica o la naturaleza del Arcano, este puede creceré mediante los signos y símbolos que se encuentran en sus dibujos.
El Mago y el Sol implican una respuesta positiva y creciente porque el Mago tiene un “solete” en sus manos y el Sol brilla después. Puede tratarse de un negocio, una inversión, una evolución espectacular que sucederá independientemente de lo demás.
El Loco y el Sol. El Loco alcanza su búsqueda, completa un recorrido. Encuentra su razón, su seguridad, deja de andar.
En el Tarot Marsella, el Sol se “adivina”, quedando manifiesto en el Rider-Waite.
El Mago y la Fuerza, increíble relación. Se une la creatividad y el dominio, el instinto y el hacer porque ambos comparten la lemniscata de su sombrero.
¿Qué os parece? ¿Creéis que os puede ayudar a la hora de interpretar?
Si conoces las lecturas de Margarita Arnal y te gusta el esquema que ella emplea, la lectura de futuro inmediato te servirá para contemplar la evolución general de un consultante durante un año. Combina dos lecturas de futuro inmediato de 10 cartas, es decir, se trata de 20 cartas, cuyas posiciones nos dan información más detallada que en el caso de la Cruz mágica, que es usualmente más beneficiosa cuando la pregunta se hace en un ámbito muy concreto. Esta tirada puede considerarse «general» sin contar con posiciones del pasado, sólo de futuro, desde el momento en que se hace a doce meses vistos.
Personalmente, no me gusta “atar” al tiempo, aunque sí es muy útil para ver la evolución de un tema concreto o de la situación general. No suelo usarla si es la primera vez que leo a una persona, porque necesito saber su pasado, sus ataduras, sus cargas y sus alegrías.
Se baraja y se corta pensando en el consultante, su nombre, sus datos y se echan 10 cartas para los primeros 6 meses y otras 10 para los restantes.
1 2 3 4 5 6 7
8 9 10
11 12 13 14 15 16 17
18 19 20
Estas posiciones son:
Carta 1: Dinero.
Cartas 2 y 3: Amor.
Carta 4: Representa a la amistad.
Carta 5: La suerte.
Carta 6: Habla de los sentimientos del consultante.
Carta 7: O de resultado.
Cartas 8 a 10: Explican estos primeros 6 meses, dan luz sobre el resultado.
Carta 11: 7º mes.
Carta 12: 8º mes.
Carta 13: 9º y 10º mes.
Carta 14: Salud durante los 12 meses.
Carta 15: Dinero.
Carta 16: Amor.
Carta 17: Resultado final, del 7º al 12º mes.
Cartas 18, 19 y 20: Explicación del 7º al 12º mes.
Otras lecturas de proyección anual que usan muchos aficionados y lectores “caseros” es la lectura del Reloj. En ella se utilizan 13 cartas, una para cada mes y la última, la 13, colocada en el centro, nos sirve como punto cohesionador.
Lectura de las cuatro estaciones
Supone un arcano mayor determinante para cada estación. A simple vista puede parecer muy simple, aunque el conocimiento exhaustivo de cada Arcano nos dará una perspectiva compleja.
1 2 3 4
Rueda del año
Su enfoque es el que más me gusta: el autoconocimiento. Las cartas deben colocarse en forma de círculo. La primera y la última posición están en el punto más alto. Sobre la base de ellos, se pueden sacar conclusiones: lo que una persona quiere y lo que recibirá como resultado.
1 6
2 5
3 4
Expectativas.
Con qué energía entra una persona.
En qué área enfocarse.
A qué renunciar.
Cómo proceder.
Resultados reales.
Siguiendo este enfoque, esta propuesta es personal. Os conté en su momento que en un sueño me leía las cartas a mí misma y seguían este esquema. La llamo «hacia dónde me dirijo».
Debéis separar el mazo en Arcanos mayores y menores.
Primero se utilizan los mayores, siguiendo estas posiciones. Haremos una cruz simple doble, por así decirlo. Los arcanos mayores se ponen en números romanos y los menores en números arábigos.
I. Dónde estoy.
II. Hacia dónde me dirijo.
III. Acción positiva o elemento a favor.
IV. Elemento obstáculo.
V. Síntesis, acción o camino a emprender.
Los arcanos menores se echarán seguidamente para intentar aportar elementos de juicio, aclarar algo o complementar.
En muchas ocasiones me he posicionado respecto el debate de si utilizar arcanos invertidos o no, si es necesario que éstos aparezcan «mezclados» para determinar su sentido anverso o reverso. Creo firmemente que no, que no hace falta si se sabe contextualizar la lectura con las distintas posiciones que los Arcanos ocupan (a favor, en contra, factor con el que se cuenta o que el que no…). Cada Arcano encierra un poder, una acción, un mensaje que puede pasar desapercibido fácilmente.
En el Loco….
No podemos olvidar que el Loco encarna una energía que puede participar de todas o en todas las energías descritas en los demás arcanos. De él tomamos el concepto “viajero arquetípico” y con él nos identificamos al enfrentarnos a los tres niveles de progresión posibles distribuidos en los diferentes niveles. Es quien se enfrenta a la vida con inocencia y falta de filtros, es el alma pura.
-Sensación: temeridad, imprudencia.
-Pensamiento: nuevo proyecto.
-Emoción: soy libre en este momento. Fuera ataduras, esta mochila no es mía.
-Sentimiento: nada me llevo, nada le debo a nadie.
-Conducta: hacer en este momento lo que creo sin meditar sobre las consecuencias.
La posibilidad de bloqueo que nos trae este Arcano viene de esa dimensión de perturbado y/o egoísta, a veces también del ser puramente libre, si bien se produce un posible conflicto respecto a los demás, porque exagera el carácter aventurero e irracional y nos encontramos con actitudes de violencia, arrogancia y agresividad gratuitas. Junto a arcanos muy débiles, pierde por completo su carga sensible e ideal, se vacía. En este punto, la persona pierde el rumbo, no crece en su inmadurez, da vueltas sin sentido en busca de un objetivo equivocado o bien ha tomado un camino erróneo que le llevará directamente a una crisis existencial. La situación de crisis y bloqueo puede acarrearle depresión y huida de la realidad. Normalmente serán problemas que no podrán resolverse sin ayuda externa. La libertad y sensibilidad serán utopía y excentricismo. El exilio de este mundo puede ser permanente, contradiciendo la mutabilidad y evolución intrínsecas del Tarot. Es un arcano contrario a la familia (en sentido tradicional) y al trabajo, salvo que se trate de actividades artísticas e independientes. Por eso, más que un estado, debe ser parte del viaje o el inicio de un nuevo rumbo.
Esta primavera es especial, habrá una alineación planetaria única durante toda esta semana. Una alineación planetaria perfecta de Mercurio, Júpiter, Venus, Urano, Marte y la Luna desfilará en la bóveda celeste.
Desde un punto de vista astronómico, una conjunción ocurre cuando los objetos celestes comparten la misma ascensión recta¹ o longitud eclíptica² en el cielo.
Podemos confundir una conjunción planetaria y un alineamiento planetario, a veces referido como un “desfile planetario». Una conjunción implica una distancia más corta de lo habitual entre objetos en el cielo, mientras que una alineación significa que los planetas se alinean en una fila en la misma área del cielo, como se ve desde la Tierra.
Me gusta creer en señales que quizás no pueda ver ni sentir, pero sí incorporar en momentos difíciles para hacerlos más livianos.
Hace tiempo que quiero escribiros. Hace tiempo que necesito contaros.
En 2013 comencé el análisis de este Arcano tan complejo y poderoso. He necesitado casi diez años y vivir todas sus dimensiones (inimaginables) para atisbar sus facetas. Los Arcanos Mayores contienen tanta sabiduría que no es posible acertar con una sola representación gráfica que aglutine todo ese conocimiento.
Me gusta hablar desde la propia experiencia, para mí otro modo no tiene sentido, así que comencé por seguir mi propio consejo: NO EVITARLO.
Este Gran Diablo (momento) presente en mis lecturas durante muchos años ha llegado a mi vida y está actuando sobre mí de pleno en todos los ámbitos. Ese momento trascendental puede retrasarse de forma consciente o no, pero no puede esquivarse mucho tiempo. Llega, como todo llega, en el tiempo que tiene que llegar, sea bueno o malo, porque el Diablo tiene clasificaciones, jerarquías y criterios en virtud de las tentaciones/debilidades que les guían. Puede ser que el mismo Diablo encierre múltiples diablos (Legión). Lujuria, codicia, ira, envidia —si crees en los pecados capitales y las tentaciones que acucian a los mortales—, o bien se ordene en un organigrama con jefes, jefecillos y secuaces. Y todo llega en tropel, como oleadas de males que afluyen con una fuerza incontrolable, donde la actitud crítica, la voluntad y la lógica, representan una minúscula resistencia e incluso desaparecen. Te ves a ti misma con siete, con nueve, con catorce y diecisiete años. Y un día todo cobra sentido y piensas: «Ha llegado, esto era. Hoy comienza la guerra». Aún desconozco sus consecuencias últimas, no así la manera en que navego esta gran ola: no sorteo su presencia, le he mirado a los ojos, he cogido su cuchillo sin mango y he asumido perderlo todo salvo a mí misma.
Quizás sea mejor explicar cómo he vivido esos planos simultáneamente desde todos los significados que encierra el Arcano.
El Diablo supone la gran tentación. En el primer nivel el Papa se relaciona directamente con él. El obstáculo de la Rueda se basa en la misma esencia: si caemos en la tentación de dejarnos llevar por los ríos de la vida, sin ser seres conscientes y plenos, -o por lo menos aspirar a ello-, nos convertiremos en seres sin espíritu. La tentación se triplica en el Diablo, porque hay que enfrentarse a él. Huir no tiene sentido, volverá aunque creas que lo has despistado. Tras él, la Torre implica un cúmulo de fuerzas activas que debemos soportar. Aquí se manifiesta de qué estamos hechos, si nuestro espíritu tiene valor por sí mismo o solo valemos por lo que tenemos. Con la Estrella sentimos seguridad en que hemos encontrado el camino para cumplir nuestra misión. Con la Luna nos enfrentamos a un juicio interno en el que eliminaremos muchas dudas y miedos que nos limitan. Justificarse es el error más común. El Sol muestra la gran virtud de ser felices, una gran felicidad terrenal. Seguramente creéis que todos sabemos ser felices, ah, no es así. Con el Juicio la verdad se desnuda, solo si eres justo podrás estar tranquilo. El Mundo es la gran carta del logro personal para esperar la transmutación a otra vida. De todos estos arcanos solo el Diablo y la Torre son plenamente activos.
Las cartas neutras contienen posibilidades, dependiendo del grado de entendimiento de cada persona. Es posible querer actuar, no poder hacer nada o bien rebelarse contra el devenir o lo que algunos llaman destino. Aquí la interpretación dependerá del resto de arcanos y el contexto de la lectura. Las cartas activas no son interpretables, necesitan ser comprendidas.
Con el Diablo comienza el tercer nivel, aquel que conduce a la liberación. Es el arcano, junto con la Muerte y la Torre, que más temor produce, incluso rechazo.
Nos adentramos en él, acudimos a su numerología, 15, que puede reducirse a un solo número, 6, o bien descomponerlo en una serie: 5+5+5. Por tanto, el Diablo puede relacionarse con el Papa o con el Enamorado.
El Diablo supone distinta cara de la misma moneda, el Papa, y desde esta perspectiva, ambos significan transición y puente “ideal”, uno hacia la sabiduría y otro hacia las profundidades del ser. Fue un ángel y así manifiesta su deseo de ascender desde su caverna, como el alma humana hundida en el cuerpo desea liberarse y ascender a la divinidad. En su relación con el Enamorado, las cadenas que atan a uno y a otro son en mayor medida consentidas o no. En el Enamorado la búsqueda de la belleza trae algún que otro desequilibrio que se superará conforme el consultante madure emocionalmente. En el Diablo buscamos una pasión que queremos convertir en amor hasta que somos adictos al poder que emana la figura que nos ata, menos voluntariamente que en el primer nivel, ya que nos encontramos en un periodo madurativo distinto.
Waite no es un «iluminado» cuando establece la secuencia con base en el seis (Enamorado/Diablo), ya que Jodorowsky establece también esta relación numérica, de modo que si el ángel de luz destaca frente al sol en el Enamorado, un ángel de oscuridad levanta una antorcha. Lo que sí le agradecemos es su representación, ya que su precisión al ilustrar los arcanos hace mucho más fácil la interpretación intuitiva. Si el primero evoca unión, el placer de hacer lo que a uno le gusta y las ataduras emocionales libremente consentidas, el Diablo representa la fuerza sexual venida de las oscuras profundidades del ser. Si el Enamorado es social, el Diablo es individual y juntos se complementan entre libertad y obligación, una vida pasional amorosa, la unión de lo divino y lo diabólico. También supone la cara reversa del Papa (5+5+5), la tentación en todas sus formas. El Papa debe formarnos para poder superar al Diablo, es decir, que este debe aceptar a aquel.
El Diablo encierra toda la oscuridad posible, propia y ajena, y por eso causa miedo. Nadie conoce el interior del mal, menos el propio, y la realidad supera todas las expectativas y todo lo imaginable. El Diablo es feliz creando dependencia, adicción y destruyendo el hogar (corazón). Esa oscuridad se alimenta y vive de la debilidad y de los flancos mal defendidos. Toda la oscuridad, la sombra de Jung, suele relegarse a un lugar muy profundo del que se tiene la llave aunque no se recuerde dónde se dejó y no se tenga fácil acceso. Cuando la persona no reconoce su sombra, pierde las llaves y ejerce el mal sobre otros en lugar de encararlo. La fragmentación del alma es muy clara. Cuando se prefiere explorar la luz sin haber explorado la total oscuridad puede ser que lo que se produzca es un abismo de tinieblas, porque cuando miras largo tiempo a un abismo, también éste mira dentrode ti y cuando se niega el centro de uno mismo y buscamos herir el centro de otro, la fragmentación puede convertirse en enfermedad mental.
¿Y si el Diablo se encuentra con el Diablo?
Así también, si Satanás expulsa al propio Satanás, contra sí mismo está dividido; ¿cómo, pues, mantendrá su poder?
Mateo 12:26
Mi diablo se remonta a mi más tierna infancia. Seres débiles contra seres vulnerables, una historia muchas veces contada. Muchos creen que el desplazamiento físico acaba con la perturbación, qué va, te acompaña siempre, cuando la oscuridad invade tu espacio una y otra vez, y sigue dependiendo la respuesta de otros, una pavesa que nunca es ceniza, una ceniza que nunca es barrida, crea una fisura que apenas ves, solo en las pesadillas. Y llega un día en que la respuesta depende de ti mismo.
La fisura que se llena de cenizas que no se barren crea una llaga, una que no deja de supurar de vez en cuando. Los miedos, las debilidades, el sueño y el insomnio, todo crea una personalidad que podía hacer daño si quisiera. La niña, la joven, la adulta, solo quiere encontrar la manera de cerrar la comunicación entre los fragmentos de la sombra. Piensa que el futuro traerá libertad y sol, pero no reconoce que existen cadenas ancladas en el primer pensamiento homicida que tuvo, matar a alguien o matarse a sí mismo, una difícil elección. Cuando te encuentras con el mal y te toca, el mal se instala en ti y se suele cometer el gran error de creer que el tiempo lo curará todo.
Llegado el momento, no actúas libremente, por supuesto, y las cadenas que se anclan en debilidades crean miedos atroces irracionales que afectan a todos tus movimientos. Como tentador y limitador, su fortaleza es tan grande como el miedo del receptor. En él encontraremos una restricción que el diablo maneja con gran maestría (no puedo, no sé, no soy capaz). Durante mucho tiempo he creído que no podía, que no sabía, que no sería capaz. He dejado que el entorno vislumbrara mi sombra y la utilizara contra mí.
La guerra se anuncia, fecha, hora y sitio.
El Diablo contra el Diablo, ¿quién puede ganar? ¿Perderá poder?
La guerra tiene un olor, la guerra tiene un peso. Lo peor de la guerra es el olor. El peso de las lealtades y de las traiciones. El olor nauseabundo de la podredumbre del alma que se alía con semejantes. El olor del miedo propio y ajeno, el olor y el peso de la vergüenza que solo sientes tú y parece pasar desapercibida.
La guerra tiene un olor, la guerra tiene un peso. Lo peor de la guerra es el olor denso del humo y de la muerte. El peso de las lealtades y de las traiciones. El olor nauseabundo de la podredumbre del alma que se alía con los semejantes. El olor del miedo propio y del ajeno, el olor y el peso de la vergüenza que solo sientes tú y parece pasar desapercibida.
La guerra tiene comienzo y no tiene fin previsto. Reconocer que uno mismo no puede aplicarse terapias o consuelo, reconocer que nadie, salvo un árbitro especialista en conflictos puede hacerlo, supone una pequeña victoria. Reconocer que se tiene miedo al futuro y que en ese miedo no se ve salida, reconocer que el Diablo es Mensajero del Ego, es una batalla ganada. Mientras tanto: escaramuzas que se llenan de importancia para distraer, el uso de instrumentos no permitidos, la lucha de la verdad contra la mentira formalizada… pueden hacerte perder el foco.
El Diablo pierde su poder cuando encuentras la cizalla adecuada para romper las cadenas. Comienza el duro camino de la liberación del ego, de la sombra propia y de las ajenas, las limitaciones y las imposiciones.
He sufrido y estoy sufriendo porque he llenado sin cesar una llaga insignificante que se hizo gigantesca en mi pequeño cuerpo. Siendo pequeña he crecido con una sonrisa y una única bandera: la ilusión de que el futuro siempre iba a ser mejor que el presente y que había olvidado el pasado.
Nací a ciento setenta kilómetros hace demasiado y tengo una constante sensación de vértigo a pesar de haberme desplazado con lentitud tectónica, necesitando toda la vida para llegar al punto donde estoy a una velocidad de cuatro kilómetros anuales, tan lento que no pude pararme, tan despacio que me gasté antes de tiempo. Y no echo en falta haberme perdido algo o haber dejado pasar de largo alguna experiencia, se trata de que utilizo más energía para recorrer los cuatro kilómetros de cada año y, para poder avanzar, algunas cosas dejaron de interesarme por completo, será porque veo más cerca el futuro que el pasado, porque sigo recordando lo que decidí olvidar y olvidé todo lo que quise conservar en la memoria, porque todavía me siento desdoblada y yuxtapuesta en todas las personas que fui, y para no perder el equilibrio intento hacerlas coincidir con quien seré: Victoria.
“Buenas noches, sacerdotisa. Me gustaría preguntarte si voy a encontrar pareja pronto, en el plazo de unos meses. Llevo mucho tiempo sola, sin pareja y sin nadie que me interese, y querría saber si las cartas indican que pueda llegar alguien especial a mi vida”.
Buenos días, Marimar.
Lo primero que llama mi atención es que preguntes por los próximos meses cuando dices llevar mucho tiempo sola. El tiempo es importante, por supuesto, si bien siempre es mejor explorar causas o fines que momentos y circunstancias concretas.
Sabemos que hay varias lecturas para examinar el futuro amoroso. Personalmente, cuando no existe pareja, me gustan dos: Lectura de Laura T., porque une los Arcanos Mayores y Menores usados de forma independiente y la Lectura del Corazón, porque nos habla de ciertos aspectos que pueden ayudarnos a encontrar pareja. Esta última la veo más interesante cuando se ha hecho una sesión completa, ya que he visto cómo hay personas que en esta lectura aparecen con posiciones invertidas o de difícil interpretación si no se ha hecho una introducción previa.
IV
culminación
I V Mago/Papisa VI III
inicio-pasado presente-obstáculos
VII
futuro
II
Conclusión
En el centro colocamos Mago o Papisa según el sexo del consultante. Los arcanos menores se colocan alrededor desde el 1 (pasado) hasta el 7 (presente) a modo de medio círculo y del 8 al 12 para el futuro, teniendo en cuenta siempre que aparezcan o no arcanos modificativos del tiempo.
Cortes.
Se barajan los Mayores de un lado y los menores después, separados.
Recomiendo analizar los arcanos que quedan cuando se pregunta (mano izquierda) y se corta. El Ermitaño aparece en el corte y la Templanza queda abajo.
Ermitaño/Templanza
8 de oros/10 de bastos
En el primer corte, El Ermitaño mira al pasado andando muy lentamente hacia el futuro. Es necesario un movimiento interno, interior, para encontrar ciertas raíces y poder comprender bien las cosas, las causas. La Templanza, carta de estabilidad, si no suceden los cambios que deseamos, puede traer estancamiento; la costumbre y la rutina de que las cosas suceden más o menos de manera uniforme o predecible.
Hay que tener en cuenta que se encuentra en el primer nivel evolutivo y la Templanza en el segundo. Abrazar la crisis del Ermitaño es beneficiosa siempre y cuando se produzca, es el paso necesarios para crecer. Algo nos dice que tienes un bloqueo producido en tu primer nivel que no te ha llevado a evolucionar correctamente. Puede ser a causa de un conjunto de verdades: ausencia de guía (padre, tutor), abandonarse a la decadencia, falta de educación emocional suficiente por falta de mentores o bien porque no eran muy estables… Todas estas causas no pueden sentenciarse en una sola lectura.
En el corte de los arcanos menores, el 8 de oros aspira a la perfección. En esta carta la estabilidad material puede estar asegurada, pero puede faltar el elemento que dota a la materia de perfección, que es el elemento espiritual. Es una carta que representa la verdadera riqueza. El diez de bastos, como todo diez, invita al fin y al comienzo. En esta carta se puede ver que la felicidad máxima está conformada por una serie de personajes que simbolizan el final feliz, que incluso puede intuirse. Es una carta de retiro jubiloso. En estas cartas se adivina una cadena espiritual al igual que el Ermitaño, quien debe indagar en aquello que no es visible, por eso cuenta con una fuente de luz. Comenzamos a intuir que en tu vida es posible que se encuentren todos los elementos necesarios para que exista felicidad y sin embargo, no haberse logrado.
La carta del presente se encuentra en posición de pasado, el inicio. La Fuerza, pasión y corazón, se encuentra de cara con el Sol, ¡qué encuentro! Es aquel que algunos llaman el encuentro de almas gemelas porque ella se encuentra con el padre cósmico, el elemento masculino que todo lo dota.
¿Ese encuentro ha sido así? Aquí debemos examinar el seis de oros. La respuesta es que no, porque las relaciones que nacen de esta carta son desequilibradas. Esa idea, la idea de ese amor, de ese encuentro que ocurrió en el pasado y que determina todo, esa idea (as de espadas) se ha mantenido de manera que las relaciones que existieran no aparecen plenas (dos de bastos) pero se idealiza a la persona objeto de la idea, Rey de copas, al que se toma como referente y fin de ciclo, 9 y 10 de copas, se le admira como compañero, padre y amante. Es una dimensión emocional que nace de un fruto inmaduro. Tiene sentido que el diez de bastos anterior nos hable de padre, madre e hijo, de la búsqueda de la perfección que sin embargo, no existe ahora, falta alguno de los elementos. Esa figura, esa idea, la madre, el padre, el hijo, permanece.
Sin embargo, el Loco del presente te invita a viajar sin esas limitaciones o ideas. El motor de alegría que es el amor, se niega ver la naturaleza de las cosas, los imprevistos, las personas que pasan por nuestra vida sin más, caballo de bastos.
En el futuro, sí aparece una ilusión, sota de copas y tres de copas, totalmente ingenua, totalmente adolescente. Es ingenua porque nace de la falta de experiencia. Si aparece cuando la persona tiene suficiente edad biológica, implica falta de maduración en los sentimientos. Puede ser que esta persona esté comprometida, 4 de oros y reina de oros, mientras tú seas mujer activa y alegre, mujer que lleva todo hacia delante, reina de bastos, pareja de una persona comprometida.
Lo que debes tener en cuenta para avanzar en el amor, a largo plazo:
La Muerte está en la posición de culminación. Esto quiere decir que tienes cadenas del pasado, ideas, materia que debe morir para poder crecer. Un proceso pendiente. Esa Muerte puede llevarte cierto tiempo, debes abandonar ideas y esquemas que no te llevan a ningún lado porque no son REALES, -Mundo como carta a corto plazo-. El Mundo impone esquemas sobre el amor que en general no son realizables, amor romántico que debe venir para acoplarse al hueco que tenemos disponible para ello. Es similar al niño que se le pregunta qué quiere ser de mayor, te describe su profesión y muchas cosas, las que tendrá, si se casará o tendrá hijos, perros o jardín. Son patrones transmitidos de forma inconsciente y que muchas veces producen frustración.
El Emperador es el hombre que te puede gustar y aparecer, que quizás ya asoma. Profesión liberal, establecido, poderoso y seguro de sí mismo.